Unas instalaciones que serán manejadas por una empresa familiar, con trayectoria en una diversificada rama de productos, pero que incursiona en el mundo de lo intangible, apostando a permanecer abierto todo el año en este centro turístico, acompañando a sus habitantes permanentes, sin evitar lo que la mayoría de las corporaciones tratan de que no suceda: el error, el desconcierto, lo imprevisible, la inestabilidad, lo desconocido; ya que saben que es el precio para lograr LA Energía, LA Innovación, EL ENTUSIASMO Y LA INSPIRACIÓN de los colaboradores que estarán al frente de la atención al público que, paulatinamente, los ira visitando y que podrán demostrar que ninguna compañía puede ser competitiva, sin la creatividad y pasión de su gente.